En la película La red social Mark Zuckerberg creaba Facebook con el objetivo de facilitar los ligues entre compañeros de universidad. Lo que no se imaginaba es que algunos años después las redes sociales iban a ser vistas por muchos como un instrumento para cambiar el mundo. Lo vimos en Egipto hace un par de meses, y lo estamos viendo estos días en nuestro país.
Me ha llamado la atención esta mañana en un debate matinal en Televisión Española que una de las participantes decía "yo no estoy segura de si esta concentración es espontánea o no porque yo no estoy en Tuenti ni esas cosas". Pues yo sinceramente creo que para analizar un movimiento nacido en las redes sociales hay que saber, como mínimo, defenderse en ellas.
A mí me llegaron eventos de Facebook hace unas semanas hablando de estas concentraciones, pero sinceramente ni imaginaba que su impacto iba a ser tan grande. Un impacto que pudimos ver en Twitter (donde la mayoría de los TT son relativos a las manifestaciones) que en los medios de comunicación, que en un principio no le hicieron demasiado caso.
Y un apunte más acerca del tema: no me sorprenden en absoluto las concentraciones en las embajadas españolas en otros países. Hace unos años, la gente de mi edad se iba al extranjero a vivir la experiencia y aprender el idioma. Ahora se van (nos vamos, que yo también pasé unos meses fuera) amargados porque aquí no hay sitio para nosotros.
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